El buen estado del vehículo es fundamental en la seguridad cuando hablamos de motos, y la única «seguridad pasiva» que tenemos en moto está en el equipamiento que llevemos puesto…
LA MECÁNICA
En las estadísticas de accidentes, los fallos mecánicos son una clara minoría, pero es lógico si vemos que la mayoría de motos son muy nuevas (dos terceras partes tenían menos de 4 años). Sin embargo nos parece un capítulo muy importante a tratar, porque son accidentes que podemos evitar fácilmente con mayores cuidados: casi siempre que un fallo en la moto provocó el accidente fue por problema de ruedas, ya fuera presiones inadecuadas o neumáticos en mal estado.
Llevar mal las presiones en un coche no es bueno, pero el coche puede andar, de hecho incluso con una rueda pinchada puede hacerlo, mientras en moto eso es impensable. Bastan cinco décimas de menos en la rueda delantera, por ejemplo, y la primera curva que abordes con apoyo se convertirá posiblemente en una caída o salida, y da igual que seas Valentino Rossi. En cuanto a «apurar» la vida de los neumáticos, tengamos claro que es lo más importante de la moto y podemos vivir sin escape, sin piezas mecanizadas etcétera, pero jamás debemos ahorrar ahí. Más vale elegir un modelo menos deportivo y que ofrezca más duración, que usar uno que nos obligue a andar con él «mal» durante semanas.
Los demás componentes de la moto tienen también su peso en nuestra seguridad: los frenos, los que más. Si tu moto frena mal, si no consigues estar cómodo cuando frenas muy fuerte, piensa en montar una bomba diferente (radial) o unos discos mejores, pastillas aparte. Será tan buena inversión como unos neumáticos eficaces, y tendrás un plus notable de seguridad. Pero incluso el mejor equipo necesita revisión, cambiar el líquido cuando está viejo y no «apurar» las pastillas.
Las suspensiones se encargan de asegurar el buen contacto del neumático con el asfalto, así que también cuentan en la seguridad. El aceite de la horquilla envejece, y si piensas usar tu moto durante bastante tiempo invertir en un amortiguador de calidad será muy buena idea. Cuidado con los rodamientos de dirección, es fácil llevarlos «tocados» (sobre todo si te dedicas a hacer caballitos) y eso estropea mucho la estabilidad en zonas rápidas.
CIFRAS
EL PILOTO
Poner a punto una moto no sólo consiste en llevarla bien de ruedas, frenos y suspensiones: la pieza más importante eres tú, el piloto. Fíjate lo primero que hace cualquier piloto del Mundial cuando estrena moto: se pasa un buen rato con sus mecánicos adaptando los mandos a sus medidas. Tú también puedes, debes, hacerlo, aunque algunas cosas no sean tan fáciles de modificar como en una moto de competición.
Empieza por las manetas, no sólo (cuando es posible, todas las motos deberían llevarlo) en distancia al manillar, sino sobre todo en altura: mucha gente conduce «forzada» por no haberse dado cuenta de ese detalle, para el que basta una llave o destornillador (con frecuencia presente en el equipo de herramientas de serie) y un par de minutos para aflojar y reapretar cada piña de mandos. Luego los pedales, cambio y freno trasero, en particular este último es muy habitual llevarlo mal y así, con mal tacto, es fácil bloquear atrás y perder estabilidad en caso de frenada apurada.
También las suspensiones deben estar adaptadas a nuestro peso: la precarga de muelle, siempre presente atrás y muchas veces también delante, sirve para controlar cuánto se hundirán las suspensiones cuando nos subamos: no deben hacerlo más de un par de centímetros, ni quedarse sin hundirse si somos un peso ligero, así que endurece o afloja (respectivamente) la precarga en función de cómo veas que se portan cuando te sientas (que alguien te sujete la moto para levantar los pies). Cuando lleves más peso (pasajero o equipaje) es muy importante cambiar ese reglaje (atrás) para no perjudicar mucho el comportamiento ni perder demasiado espacio libre al suelo.
CUESTIÓN DE SEGURIDAD
Habrás oído hablar de la «seguridad activa» y la «seguridad pasiva». La primera es aquella que «evita» accidentes y ejemplo típico de ella son los frenos ABS; la segunda es la que, cuando el accidente es inevitable y está ocurriendo, «minimiza» las consecuencias, y el ejemplo típico es el cinturón de seguridad o los airbag. En moto no tenemos ni cinturón de seguridad ni airbag (por ahora) así que nuestra única «seguridad pasiva» es la que nos ofrece nuestro equipamiento, es decir, lo que nos protejan las prendas que nos pongamos: casco, chaqueta, guantes, pantalón, botas…
Pero es importante saber que, además de protección si tenemos un accidente, el equipamiento tendrá también funciones de «seguridad activa». Unos colores vistosos, por ejemplo, permitirán que nos vean antes (o que nos miren) y con ello evitaremos la situación de riesgo que suele darse cuando no nos perciben. La «comodidad» también es un elemento de seguridad activa: si la prenda nos abriga en invierno y evita que estemos tiritando de frío, estaremos conduciendo mucho más concentrados en el tráfico y nuestro pilotaje. Y la protección no sólo entra en acción cuando ya estamos teniendo el accidente, puede ayudar a evitarlo: es bastante frecuente sufrir impactos de objetos (piedrecitas, insectos grandes, pájaros…) al ir en moto ya que estamos expuestos a ello, y según qué impacto puede dolernos (o lesionarnos), desequilibrarnos y provocar una caída. Si te parece exagerado fíjate cuántos coches tienen sus lunas (o faros) rotos por impactos de este tipo y piensa qué ocurriría si en lugar de ese cristal hubieras recibido tú el impacto.
Por ello, ya sabes: casco integral y guantes siempre, y chaqueta (ligera en verano) con pantalón largo. No dejes un centímetro de piel al descubierto aunque «sepas que no vas a caerte» (cosa que nadie sabe realmente)
© Agradecimientos y Créditos: Motociclismo.es
Entradas relacionadas: Categoría Seguridad Vial
Nota: Puede que los enlaces, imágenes y/o vídeos dejen de funcionar.
Apartado muy a tener en cuenta… sobre todo los que hemos luchado "arduamente con los mecanos" y sabemos además lo importante que es la seguridad por "activa y por pasiva"
Me gustaMe gusta