Breves consejos para circular seguro en moto

Repaso rápido a lo que debes saber antes de cogerte al manillar…

Siempre que vayas a subirte sobre la moto, realiza una inspección de tu motocicleta: ruedas, líquidos, cadena, luces y frenos. Con esto en orden y un mantenimiento ordinario podrás volver a casa casi con la garantía de que ninguna avería mecánica convertirá tu día en una pesadilla de la que querrías estar a salvo…

Usa siempre prendas de protección en función de dónde vayas a circular. Imprescindible casco, chaqueta con protecciones, espaldera, guantes y calzado apropiado. Para ciudad, unos pantalones de kevlar y para carretera, pantalones de cuero o cordura también con protecciones. El asfalto está muy duro y abrasa hasta en invierno.

En la moto, ni una gota del alcohol. Conducirlas requiere un uso completo de nuestro cuerpo y equilibrio por lo que debe quedar apartado de nuestra dieta hasta que estemos en casa con ella guardada en el garaje.

Usa prendas reflectantes o con colores llamativos para aumentar tu visibilidad. Por supuesto, las luces tanto delantera como trasera deben estar en perfecto estado de funcionamiento.

Asegúrate de ver y sobre todo de ser visto. En un cruce, asegúrate que el vehículo que viene en frente te ha visto si va a girar. Si vas a adelantar, el conductor que circula delante se ha percatado de nuestra presencia por el espejo retrovisor. Y avisa a ese peatón que va a cruzar por un lugar prohibido.

Respeta las normas de circulación.

Adecua la velocidad a las condiciones de la carretera, de la motocicleta y las tuyas (toma de medicamentos, ausencia de sueño, enfermedades…). Y en caso de duda, mejor que te lleven o usa el transporte público.

Vigila todo tu entorno en busca de trampas naturales o artificiales: gravilla, asfalto pulido, hojas, ramas, pintura deslizante, baches, alcantarillas, raíles de tranvía, adoquines, mangueras, etc.

Y sobre todo, diviértete… 😉